Pintor innovador, Joaquín Clausell produjo pinturas significativas y transicionales que se han convertido en obras maestras modernistas tempranas. Al colocar al espectador en medio de la marea cuando esta regresa a la costa en la tarde, Clausell manipula magistralmente la luz y el color para transmitir el peso de las nubes que crecen en el cielo y el torrente de agua que golpea la playa. Atardecer en el mar (la ola roja) evita la grandeza distante propia de la pintura del siglo XIX en favor de una imagen visual más personal pero igualmente poderosa.